martes, 27 de noviembre de 2007

Cortejos de amor en las buitreras



Así se titula este artículo que El Viajero dedica este fin de semana a uno de los protagonistas del cielo guadalajareño (gentilicio aburrido y carente de imaginación como pocos que conozco, las cosas como son). Observar a los buitres leonados en el Alto Tajo y la serranía conquense es un placer, y más si se los puede ver de dos en dos, como en esta época. Interesante este fragmento del artículo:

"El macho persigue a la hembra para colocarse por encima de ella mientras aletea fuertemente; luego extiende las patas todo lo que puede para llegar casi a tocar a su compañera. Esta postura de vuelo la mantienen y repiten durante largos periodos de tiempo. En ocasiones, cuando el macho se encuentra en vuelo sobre la hembra, esta se da la vuelta en pleno vuelo y atrapa con sus garras las de su compañero, dejándose caer en el vacío muchos metros entrelazados como una pelota".

Por cierto, para distinguirlo de los buitres negros (que se encuentran más hacia el suroeste de la península) hay que fijarse en la cola. La del negro es más larga y acuñada, aunque no sé si se aprecia en la fotografía.

sábado, 10 de noviembre de 2007

Agricultura biológica y consumo

El hombre de la foto es Jose, del Taller Ecológico, en la carretera de Pareja a Durón, y está en el puesto de frutas y verduras que tiene cada sábado en el cruce de Durón.

Hoy hemos hablado con él para proponerle un intercambio con el grupo de consumo, que ya está en marcha. Jose cultiva en su huerta, y todo lo que sale de ahí es ecológico, orgánico. Por eso los productos varían según la temporada. Hoy, por ejemplo, tenía lombarda, pimientos de Padrón, cebollas dulces del tamaño de un melón (¡anda ya!) o tomates cherry, todo cultivado orgánicamente. Además tiene otros productos, como se ve en la foto, pero esos ya son traídos de Madrid y cultivados convencionalmente.

Recuerdo a quien esté interesado en unirse al grupo de consumo que es más que bienvenid@. Estamos utilizando una página protegida por contraseña en lugar del wiki, pero no hay más que dejar un comentario en el blog y Sésamo se abrirá...

miércoles, 7 de noviembre de 2007

¡¡¡¡Extras cine!!!!

Hace unas semanas escribía sobre Guadalajara y el cine, y hete aquí que este domingo me encuentro este cartel para participar como extra en Una palabra tuya. Porque estaré de viaje, que si no... Quien tenga ganas, todavía está a tiempo de disfrutar del Alto Tajo y saltar a la fama, todo por el mismo precio. El número de teléfono es el 666 581 690 y la persona de contacto, Vanesa (vanesa(arroba)agencia2001(punto)es).

viernes, 2 de noviembre de 2007

En el día de los Difuntos...

el consuelo de la poesía.



He visto morir a mucho hombre joven...
Vicente Gaos

He visto morir a mucho hombre joven, y sólo puedo juzgar ya mi vida como un regalo,
como una inmerecida dádiva que exige a cambio un empleo digno.
Ahora recuerdo en particular a aquel compañero:
Un viento delicado curvó la ágil palma, el álamo desvalido,
y el tronco primaveral cayó al otro lado de la ancha orilla,
llevado por las aguas de un río que no puede atravesar mi barca.
Inútilmente le estuve llamando desde esta margen a gritos:
"Mira, mira, ya ha venido mayo de nuevo, el campo está bañado en luz. Despierta".
Pues era sólo un falso consuelo. No estaba dormido.
El aire tenía una pasmosa dulzura, la luz vibraba sobre la
corriente con la misma indiferencia del agua.
Me alejé, entre agitado y sereno, por el inmenso campo desierto.
Y ahora, al recordar, me pregunto por qué inescrutable designio
yo
estoy todavía de este lado del agua,
gozando de la luz, del aire, de las maravillas del mundo,
o de las maravillas del hombre, cuando escucho música,
o tengo con admiración en las manos un hermoso libro.
De la orilla de Oriente a la de Occidente no hay ningún barranco
no hay ningún abismo infranqueable.
Sólo un rizado río de agua mansa, de agua continua.
Sólo un soplo de aire.
El misterio de la vida es mayor que el misterio de la muerte.
El misterio de la muerte es sólo una parte del de la vida.
Una sucesión incesante nos lleva de la mañana a la noche,
de la oscura matriz a las rosas más claras.
Aquí, en esta sala, mientras escucho a Mozart o a Bach,
mientras los sonetos de Shakespeare o las obras de Racine encienden mi vida,
aquí, en esta sala, tengo abierta la puerta que comunica con la alcoba oscura.
Y a la vez diviso por la ventana el jardínn donde juega mi hija.
(Y mi hija va de la casa al jardín, y del jardín a la casa,
a tomar en la cocina un vaso de agua, o a coger tal vez de la
alcoba algún juguete olvidado.
Y yo le digo: "Espera, descansa un poco. Un vaso de agua fría ahora te haría daño".
O bien: "No te pongas así en la corriente. Cierra la puerta").
Y más allá del jardín, por la mediación del valle la vista resbala
sin la transición hasta las montañas.
Una interminable unidad acoge en su corazón a la nieve del pinar
y al césped de la ladera,
a la piedra y al sol, a la culebra y al águila,
a los vivos y a los muertos.
Esta mañana, mientras contemplaba a mi hija en su juego, he
recordado a mi padre.
Y me ha llenado de confianza saber que el río sigue en su cauce,
entre las orillas,
entre las dulces orillas de abril y enero, por las que espero en la
vida.
Interminable es su tenue hilo, siempre acompaña a la primavera
la renovación de la carne,
y todo es y será como antes fuera,
"Bien - me he dicho-, ya has vivido media vida, ya la has desvivido,
ya has matado media vida, ya tienes media vida muerta.
Y no puedes envanecerte en verdad de que en tu madurez
hayas dado excesivo fruto,
pero has adivinado que la plenitud de la vida es esto tan sólo:
la plenitud de la muerte, la serena posesión de un punto intermedio
entre las dos grandes orillas comunicantes".
Ahora estoy ya inmerso en aguas de profundidad,
a igual distancia de mi padre, a quien no puedo decir
que llegué a conocer,
y de mi hija, de quien tengo la seguridad de que ha de ignorarme.
(Aunque todos hayamos de adivinarnos un día u otro.)
He tomado una piedra en las manos y la he estado contemplando
larga, largamente,
con la profunda veneración de quien toma contacto con algo a la vez próximo y remoto.
No, ya no sé a qué mundo pertenece esta piedra,
yo no puedo saber si esta piedra encierra en su seno la aparición,
la concentración de la Nada,
y si la Nada y la muerte no son la negación de la vida,
sino algo más bien que tiene un puesto en la vida, dentro de ella,
algo que ignoramos y que nos ignora,
como los hombres nos ignoramos unos a otros,
como todos ignoramos a la vez la vida y la muerte.



La fotografía es un detalle de la escultura "Sternenfall" (caída de estrellas), de Anselm Kiefer. Fotografiado por Dalbera.

jueves, 1 de noviembre de 2007

Led Zeppelin revisitado



Con la melodía de Stairway to Heaven (Escalera hacia el Cielo) han felicitado "los Hontanillos" a Rainer por su cumpleaños. No me resisto a copiar la letra. Léanla tarareando la melodía en cuestión. Si no entienden algunas alusiones, no les den más vueltas. Hay que vivir en Pareja y/o conocer su historia para comprenderlas:

Entre barras de pan
viaja un chico alemán,
en La Alcarria ¿qué se le habrá perdido?
Es normal el dudar
de su aspecto alemán:
es moreno y canta por soleá

Uhhhhhhh, uuuuhhh, es que a mí Rainer me mola

Es el mejor cliente
del eterno Vicente.
Tiene un don, es un chico paciente.
Con su novia germana,
que es de acá pero ordenada,
montaron un negocio de la nada

La cosa funcionaba,
el guiri lo disfrutaba,
pero alguien vino a joder la marrana.
Aparecieron los jipis
con sus sueños de tripis
y piso a piso su casa okupaban

Uhhhhhhh, uuuuhhh, es que a mí Rainer me mola

Con su guitarra encanta
a toda Castilla-La Mancha
y en la olma nos brinda su marcha.

En su casa fumaban
con las botas calzadas.
Las costumbres niponas no observaban.
Como espacio sobraba
los jipis procreaban:
cuando uno se iba dos llegaban.

Uhhhhhhh, uuuuhhh, es que a mí Rainer me mola

(Parte rápida)
Y si al cantarte esta canción
desafino con la voz,
de veras te pido perdón.
Esto no tiene solución
pues a pesar de tu tesón,
de tu esfuerzo y tu sudor
nunca seré un buen cantaor,
pero tienes mi corazón.