Cerrando puertas

Aquí cierro Alteralcarria. Hubiera querido que cumpliera por lo menos un año de vida, pero no va a ser posible: no podría seguir manteniendo un blog sobre el entorno rural (por muy libre que sea mi interpretación de este concepto) desde un barrio céntrico de Madrid, donde estaré viviendo los próximos meses, sin saber cuándo ni acaso si volveré a ser parejana.

Gracias a tod@s los que incomprensiblemente han llegado a parar aquí, a quienes alguna vez han dejado un comentario, han contribuido con su poesía, sus ideas o sus pensamientos, y a quienes simplemente han leído algunas líneas y me han hecho un comentario de viva voz.

Ha sido un placer.

Blog sobre pueblos abandonados

Dando tumbos por la blogosfera me encuentro con el blog Pueblos abandonados, cuyo objetivo - según su propia descripción - es

"recabar y poner en Internet información sobre pueblos abandonados o en proceso de repoblación, con datos lo más exactos posibles sobre su situación actual, con el objetivo de crear, poco a poco, una herramienta de consulta para todas aquellas personas interesadas en adquirir y restaurar una vivienda en alguna de estas aldeas".

Paradojas de la vida, puesto que a la vez que Guadalajara comienza a estar entre las tres primeras provincias de España en cuanto a crecimiento de la densidad de población (junto con Madrid y Barcelona, si no recuerdo mal), el número de pueblos abandonados sigue aumentando a la misma velocidad. En realidad, esto tiene una fácil explicación: a lo largo de todo el tramo de la A-2 desde Guada a Madrid crecen pueblos y ciudades enteras de la noche a la mañana, pero todo lo que está pasado la ciudad en dirección Cuenca o Zaragoza se sigue vaciando.

Tanto en la Sierra Norte como en la Alcarria hay ejemplos de proyectos de rehabilitación de pueblos abandonados (con más o menos éxito), así que yo solo espero que esta información pueda ser de utilidad a alguien que se pierda por aquí.

Naturaleza muerta

El valor y la imposibilidad del silencio, las palabras y las tautologías, dos pares de ojos a menos de treinta centímetros, té con leche, la ciudad en la lejanía, el frío de montaña, el añochecer con la radio del coche, la luna cuna, la noche, la falta de inercia, la duda, el miedo, el cansancio mortal, el desorden, lo profundo y lo banal, la mirada apagada y los ojos cansados, la leve resaca, la sed, la montaña rusa en cuerpo y mente, la puerta de El Prado, Juana la Loca, la parálisis mental y corporal, el grito contenido en pro de la normalidad, el mundo real, el virtual y la confusión entre ambos, la política, las fechas límite, los proyectos empezados, la batería gastada, el Babelia olvidado en algún bar, la certeza de la amistad, Borges, el sábado que termina, el frío en los pies, la privacidad, la melancolía y los puntos suspensivos.

Spa rural en Pastrana

Sea un acrónimo de la expresión latina "Salus per Acquam" (salud a través del agua) o una referencia al pueblo belga de Spa, conocido en la época romana por sus baños, el caso es que esta costumbre de moda ha llegado hasta aquí.

O casi: se ha quedado a unos kilómetros de Pareja, concretamente en el pueblo de Pastrana, que quizá comience a ser conocido por algo más que por la historia de la Princesa de Éboli.

El spa está instalado en un antiguo molino rehabilitado y mantiene un carácter sencillo, muy diferente al de la mayoría de los establecimientos de este tipo.

Después se siente uno como una tirita usada, tiene la cabeza vacía y una sonrisilla tonta que no se le quita hasta el día siguiente. Altamente recomendable.

El pasado 6 de enero

Los Reyes Magos llegaron a Pareja en tractor y dieron los regalos a los niños en mano. ¿Quién da más?